Despejando dudas

Una de las labores de los dirigente es, sin duda, la de aleccionar a sus rebaños (no siempre sinónimo de borregos) de la realidad circundante. Por si acaso alguno de nosotros, pobres mortales, no llegamos a la comprensión de la compleja realidad que nos rodea. Muestra de ello son las campañas publicitarias que lejos del adoctrinamiento -las diosas nos libren- aleccionan a la ciudadanía. Pongamos que nuestra borreguez no nos deje darnos cuentas de que el gasto es felicidad. Pues para ello la santa junta-de-castilla-y-león y el excelentísimo ay-untamiento-de-salamanca se preocupan de recordarnos que gastar es un placer e incluso una necedad (perdón, necesidad). Menos mal que aún podemos dormir tranquilos sabiendo que alguien se ocupará de pastorearnos hasta los verdes valle de felicidad consumista.

Salamanca brilla en Navidad, campaña de incitación al consumo de nuestros bienamados gobernantes.